Carillas dentales: ¿cómo es el proceso y por qué a veces sí hay que tallar los dientes?

Aplicamos nuestra experiencia para una sonrisa perfecta con técnicas avanzadas

Las carillas dentales son uno de los tratamientos estéticos más demandados en la actualidad. Gracias a ellas, podemos transformar la sonrisa de un paciente de forma rápida, segura y altamente estética. Sin embargo, existen muchos mitos en torno a su colocación, especialmente sobre si es necesario tallar o no los dientes. En este artículo te explicamos cómo se realiza el procedimiento real en clínica, con ejemplos del día a día, y por qué el tallado —aunque mínimo— puede ser necesario.

¿Qué son las carillas dentales?

Las carillas dentales son finas láminas que se colocan sobre la parte frontal del diente con el objetivo de corregir defectos estéticos como el color, la forma, la posición o el tamaño. Pueden estar fabricadas en diferentes materiales, siendo las más comunes las carillas de porcelana y las de composite.

El mito del “no tallado”

Es frecuente escuchar que las carillas no requieren tallado del diente. Si bien es cierto que en muchos casos se pueden hacer sin modificar apenas la estructura dental, la realidad clínica es que un mínimo tallado es necesario en muchos de los casos para lograr un ajuste perfecto.

¿Por qué? Porque las carillas deben tener una inserción adecuada sobre el diente, respetar los espacios entre piezas y encajar de forma armónica en la sonrisa. Sin este tallado, por leve que sea, pueden quedar con exceso de volumen o con bordes mal definidos.

Prueba de carillas individualizadas en clínica

En nuestra clínica dental, apostamos por una odontología personalizada y precisa. Por eso, antes de cementar las carillas definitivas, realizamos una prueba de carillas en plástico individualizada.

Este paso nos permite comprobar:

  • El ajuste individual de cada carilla.
  • La inserción correcta sobre el diente previamente preparado.
  • La armonía estética en cuanto a color, forma y grosor.
  • El nivel de naturalidad que tendrá la sonrisa final.

En el vídeo que acompaña este post, podéis ver cómo realizamos esta prueba. Ya se ha hecho un pequeño tallado en los dientes para permitir que las carillas encajen perfectamente. No se trata de una eliminación agresiva de estructura dental, sino de un pulido mínimo y controlado que garantiza el éxito del tratamiento.

¿Por qué es importante esta prueba previa?

Este tipo de prueba no solo nos da seguridad como profesionales, sino que también permite al paciente visualizar cómo quedará su nueva sonrisa. Es una forma de involucrar al paciente en el proceso y asegurarnos de que se cumplen sus expectativas estéticas y funcionales.

Además, nos permite hacer ajustes en tiempo real: modificar una forma, pulir un contorno, revisar un grosor… Todo con el objetivo de lograr un resultado lo más natural posible.

Carillas con ajuste perfecto y aspecto natural

El éxito de unas buenas carillas no reside únicamente en el material con el que están fabricadas, sino en cómo se planifica, ejecuta y personaliza todo el tratamiento. Desde el tallado inicial hasta la cementación final, cada paso cuenta.

En nuestra clínica trabajamos con protocolos individualizados que garantizan un ajuste perfecto de las carillas. Gracias a la tecnología y a la experiencia del equipo, conseguimos que las carillas:

  • Se integren con naturalidad en la sonrisa.
  • Tengan un grosor adecuado para evitar sensaciones extrañas.
  • Mantengan un color uniforme y estético.
  • Respeten la funcionalidad de la mordida y la fonación.

¿Qué conseguimos con unas carillas bien planificadas?

Una sonrisa natural, funcional y duradera. Porque no se trata solo de mejorar la estética, sino de hacerlo sin comprometer la salud bucodental del paciente.

Con unas carillas bien ajustadas, el paciente puede:

  • Sonreír con confianza.
  • Hablar con normalidad.
  • Masticar sin molestias.
  • Sentirse cómodo desde el primer día.

Las carillas dentales son una solución estética excelente, pero deben realizarse de forma personalizada y con una planificación cuidadosa. Aunque muchas veces se dice que no hay que tallar el diente, en la práctica clínica real es habitual realizar un mínimo tallado controlado para garantizar un resultado óptimo.

La clave está en la personalización del tratamiento, en la realización de pruebas individualizadas como la que mostramos en el vídeo, y en la experiencia del profesional que lleva a cabo el proceso.

Si estás pensando en mejorar tu sonrisa con carillas dentales, te invitamos a pedir cita en nuestra clínica. Estaremos encantados de estudiar tu caso y ofrecerte un plan de tratamiento totalmente adaptado a ti.

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